Los cómics del tío Sam #81: Ultimate Fantastic Four - El Cruce

Pues con este tomo comienza mi etapa favorita de esta colección, la de Mark Millar y Greg Land:

Después de unirse a los genios del Edificio Baxter, el joven Reed Richards pasó su adolescencia trabajando en un sistema para transportar materia a través de un universo paralelo. En el primer test de prueba estaban también presentes los hermanos Sue y Johnny Storm y Ben Grimm, el mejor amigo de Reed. Entonces hubo un accidente que cambió a todos ellos para siempre. ¡Ahora son los 4 Fantásticos y el mundo nunca volverá a ser el mismo!

El comienzo de la memorable etapa de Mark Millar y Greg Land en Los 4 Fantásticos Definitivos. Aunque su carrera es todavía corta, Reed, Sue, Johnny y Ben han visto unas cuantas cosas extraordinarias, pero nada les ha preparado para el mundo en el que están a punto de entrar. Reed Richards ha utilizado su genio científico para contactar con una Tierra que ofrece sorprendentes similitudes con la suya. Allí también existen los 4 Fantásticos, solo que parecen más veteranos que ellos ¿Acaso ha encontrado la puerta entre el Universo Ultimate y el Universo Marvel convencional?

Puede que Mark Millar no impregne ni de lejos la estupenda psinergía de grupo que sí mostró Warren Ellis en su etapa. Puede que ni siquiera se mantenga fiel a la esencia de los personajes en algunas ocasiones. ¡Qué diablos! ¡¡Si hasta su Reed a veces parece tonto!! Pero hay que reconocerle una cosa: sus historias molan. Y con el dibujo de Greg Land, molan mucho más.

Y es que cuándo un cómic comienza con la persecución de unos delincuentes cronales por el período cretácico y la era precámbrica, manteniendo comunicaciones a tiempo real entre edades situadas a 50 millones de años de distancia, MOLA.

Y mola aún más si Reed está manteniendo contacto con los 4 Fantásticos de un universo paralelo, que lo invitan a ir a su realidad para darse cuenta de que una infección ha consumido a todos los metahumanos del planeta convirtiéndolos en súperzombies inteligentes que quieren invadir nuestro mundo después de haber consumido el suyo.

Y mola todavía más si la madre de los Storm regresa de entre los muertos para llevar a los 4F a una expedición a Atlantis, de dónde liberaran por error a Namor, un mutante atlante que mantendrá un interés amoroso por Sue y amenaza con ahogar New York si este no es correspondido.

Y bueno, deja de molar un poco cuándo te meten para cerrar todo un annual un tanto insustancial en el que se nos presenta a los Inhumanos con el poco agradable dibujo de Jae Lee.

En resumen, que aunque los 4F de Millar sean más espectadores que actores, y que Land a veces la pifie con algunas expresiones (la del final de Ultimate Fantastic Four #23 de Sue es un poema xD), tenemos un cómic súper frenético lleno de imaginación y aventuras, con un dibujo precioso, y que no aburre en ningún momento. Ganazas del siguiente, porque es todavía mejor.

Lo mejor: La visita a los Marvel Zombies. El combate contra Namor. El dibujo de Land. Lo buenorra que está la madre de los Storm.

Lo peor: El dibujo de Jae Lee. Que Millar no desarrolle igual de bien que Ellis a los 4F.

Reseñas de tomos anteriores: Lo Fantástico, Muerte, Zona-N