El hombre que dicta la sentencia #94: Rurouni Kenshin [Ed. Kanzenban] #2

Pues otra reseñita más de Kenshin. Espero que le déis una oportunidad a este manga, ya sea estas navidades o cuándo Panini empiece a distribuirla. No os ibais a arrepentir ;)

Kurogasa, "el asesino del Sombrero Negro", es un temible espadachín que está poniendo en jaque al nuevo gobierno Meiji, dando caza a cada uno de sus gobernantes, antaño guerreros de la Restauración. Interesado por la misteriosa técnica con la que este despiadado asesino paraliza a sus víctimas, y temiendo que sea alguien del pasado, Kenshin decide intervenir junto a Sano para parar la oleada de asesinatos. Sin embargo, los años han pasado factura en él, y ahora goza de dos grandes debilidades: la carencia de su instinto asesino de antaño, y el hecho de tener a gente a la que proteger. ¿Podrá vencer a su enemigo pese a todo?

Por otro lado, una misteriosa mujer que responde al nombre de Megumi Takani se presenta ante el rurouni y los suyos, pidiendo protección. ¿Pero de quién huye, para albergar una mirada tan desesperanzadora? Su nombre es Kanryû Takeda, y su guardia, ¡el mismísimo Oniwaban-shû.

Un tomo muy bueno, dónde dejamos atrás los capítulos autoconclusivos y empezamos con las primeras sagas o mini-sagas de Rurouni Kenshin.

En la primera, Kenshin tendrá que hacer frente a Jin'e "Kurogasa" Udô, un maestro del Nikaido Hei-hô, y un experto de la técnica definitiva de este estilo, el Shin no Ippô. Gracias a esta técnica, este asesino es capaz de paralizar a otros imponiendo su aura en ellos. Kenshin y Sano tendrán un primer encontronazo con él protegiendo a Tani, uno de los antiguos compañeros de Kenshin, ahora miembro del gobierno Meiji. La cosa se complicará aún más cuando el hombre del sombrero negro decida cambiar de objetivo e ir a por Kenshin, al enterarse de que se trata del afamado Hitokiri Battôsai.

Una mini-saga muy buena, en la que vemos cómo nuestro rurouni se encuentra ante un dilema, pues probablemente se vea necesitado a volver a ser el asesino que era antes para derrotar a su rival. Sin embargo, los gritos de Kaoru le harán recordar quién es ahora.

Por otro lado, tenemos la llegada de Megumi Takani, personaje que me encanta. Su petición llevará al a partir de ahora denominado "Grupo Kenshin" (Kenshin, Sano y Yahiko), a hacer frente al temible Oniwaban-shû, un grupo de onmitsu muy afamado y de gran eficacia en sus misiones. Bastante originales en diseño, este grupo de personajes nos traerá buenos e interesantes combates.

En general, un tomo muy entretenido. Me resulta interesante ver la influencia que ha tenido la obra de Watsuki en el bueno de Oda (ya que fue su ayudante). Las técnicas hipnóticas de Jango recuerdan a las aquí mostradas por Jin'e con su Shin no Ippô. Por otro lado, el personaje de Megumi cómo ya digo me encanta. Es preciosa (L) y me río bastante cuando se pone a picar a Kaoru (xD).

Lo mejor: El combate entre Jin'e y Kenshin, el personaje de Megumi y el Oniwaban-shû.

Lo peor: Watsuki se toma aquí las licencias del shônen para que los protas salgan airados, porque si Jin'e quería despertar al antiguo Battôsai cabreando a Kenshin, lo mejor habría sido matar directamente a Kaoru, y no simplemente secuestrarla y ponerla en peligro.

Reseñas de tomos anteriores: #1