Los diferentes autores jóvenes empiezan a incomodarse ante la súbita aparición triunfal de varios autores veteranos. Por su lado, Saiko tiene sentimientos encontrados respecto a Azuma, ya que lo asimila con la figura de su malogrado tío, Taro Kawaguchi. En medio de todo esto, los Ashirogi Muto reciben la llamada de un viejo conocido, ¡¡y la situación da un gran vuelco!!Pues lo dicho, tomo que encuentro muy disfrutable. El primer arco de Nanamine no me dejó indiferente, y este tampoco, viniendo con una idea aún más interesante que en el anterior. Sin embargo, se le puede criticar que al final pierde por lo de siempre, y hecho en falta alguna redención del personaje. Me sabe mal que al final Kosugi no haya conseguido sacarle adelante.
Por otro lado, también me parece un despropósito meter a Azuma y que, para cuándo da la campanada, se retire. Tira por tierra todo lo que parecía defender esta saga: que los veteranos todavía no tienen sus días contados.
Interesante ver por cierto en estos capis a Aoki con malos pelos y ojeras, que ya cansaba ver a la tía siempre en plan refinada y súper monísima de la muerte. ¡Qué es una mangaka, joder! ¿Dónde está el estrés? De hecho me ha parecido tan raro que no la he reconocido al principio. Pensé que era otro personaje (xD).
Y bueno, cambios editoriales en el horizonte. Despedimos al editor jefe Sasaki, y empezamos los que parecen ser los compases finales de la historia. A la vez que Eiji ha dado con la temática para su nueva obra (que me parece un mojón al lado de Crow), los Ashirogi dan con otro proyecto de serie que cumple con todo aquello que les falta para ponerse a la altura de Niizuma, pero que al mismo tiempo se mantiene fiel a su estilo. ¿Será ésta el caballo ganador?
En resumen, un buen tomo en el que me gustan bastante los temas que se tratan. Aunque no entiendo nada la portada. Kaya y Miho apenas sí salen...
Lo mejor: El nuevo plan de Nanamine. El personaje de Azuma. La despedida del editor jefe Sasaki. El humor.
Lo peor: Que no se termine por redimir a Nanamine. Que se deseche de forma tan lamentable a Azuma.
Reseñas de tomos anteriores: #12, #13, #14, #15, #16
A mi me ha gustado mucho este tomo: el método de Nanamine es brutal, aunque muy desaprovechado en el sentido de presentar pocas series. Lo de Azuma me parece un despropósito a mi también, podría haber seguido con su serie.
ResponderEliminarPersonalmente, lo peor de Bakuman es el regreso de Nakai. Mi personaje más odiado sin duda.
Por otro lado, me gusta que se vaya encarrilando a su final, puesto que ya queda poco que tratar y así la obra concluirá sin alargarse ad eternum.
Veo que soy el único que piensa que para la gilipollez que hizo Nanamine, mejor hubiese comprado la JUMP (que podía, con todo el dinero de su papi).
ResponderEliminarEl tomo no es malo, solo que Nanamine carece de lógica shonen, como dices tú.
Comprar la Jump no creo, pero seguro que le salía más rentable montar su propia editorial. Aunque él lo que quería era tumbar a los Ashirogi mediante este método. Comprando Shueisha (algo imposible) no satisfacía sus ambiciones
EliminarEra una forma de hablar xD No sé, sigue sin parecerme tan bueno como tomos anteriores. Es de los peores, comparándolo con el resto, digáis lo que digáis. Ojo ahora a la saga final, emocionante hasta la última viñeta.
Eliminar"Digáis lo que digáis" xD ¿Quién te ha nombrado "la voz de la razón"? xD
EliminarLos mismos que os nombran a vosotros algunas veces. ¿Qué pasa? ¿No puedo tener yo también contactos místicos que me den la verdad absoluta? Estoy en línea directa con Dios. Solo hay que pulsar 666 en el teléfono.... Oh, wait.
Eliminar¿Que estás en línea directa con Dios? Pues tengo una cosa que decirte: ¡YO SOY DIOS! BOAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHAHA!
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