El hombre que dicta la sentencia #56: Seikon no Qwaser #2

¡Cagüen la leche! Al final este jueves no ha llegado el reparto y no he podido pillar nada. A ver si este viernes hay más suerte (:S). Sea como sea, he aprovechado para terminar de releer el segundo tomo de Seikon no Qwaser, así que vamos allá con su reseña:

LOS SERES QUE DESPUÉS DE ABSORBER LECHE SAGRADA SON CAPACES DE MANIPULAR A SU ANTOJO UN DETERMINADO ELEMENTO...

SON CONOCIDOS COMO QWASER.

¡¡En medio de la disputa por la búsqueda del lienzo que se encuentra oculto en algún lugar del instituto, aparece la sádica Katja junto al ángel vengador de cobre!!

Seguimos con esta oscura serie de tetas, con una portada que sé que le gustará a cierto bloggero (xP). Y seguimos con un tomo aún mejor que el anterior, que no peca de tantos fallos.

En el primer capítulo, termina la presentación de Katja, que con su apariencia se ha ganado tanto el cariño de Miyuri cómo la servidumbre de Hana (ver cómo la lolita somete a esta lolicon pervertida es genial :D). Tras un encuentro entre el qwaser de hierro y la marionetista del cobre, vemos cómo los Doce Adeptos (ahora 11, tras la muerte de "Magnesio"), empiezan a hacer su movimiento.

En el siguiente capítulo, conocemos algo del pasado de Teresa (¡está monísima de pequeña!^^), la María de Sasha. Así mismo, un enemigo de su pasado vuelve para amenazar a las compañeras de Sasha: "Cámara de Gas" Croa, "el Purgador", un qwaser perteneciente a los Doce Adeptos capaz de manipular el gas clorhídrico. Sasha logra derrotarle gracias a la ayuda de Katja y Teresa, y esta finalmente vuelve a sonreír (qué bonico =3).

Después, tenemos a Mafuyu, que viaja en solitario a una antigua residencia de Yuudai Yamanobe para buscar pistas sobre el paradero del Theotokos de Sary Su. Sin embargo, es emboscada por varios servidores de los Adeptos, y rescatada por Ootori y Elizabeth. La segunda, pese a su apariencia varonil, es otra qwaser, portadora de la espada Excalibur, y manipuladora del titanio. Con estos dos nuevos personajes, se abre un nuevo frente en la búsqueda del Theotokos, ya que si bien Ootori perteneció a los Doce Adeptos en el pasado (cómo qwaser del sodio), ahora va por libre junto con su aprendiz, con el objetivo de emplear el Theotokos para encontrar "al Mesías".

En el último capítulo, Mafuyu y compañía tienen que pagar una deuda a Miyuri, vistiéndose y actuando como sirvientas (Sasha incluido xD) para su exposición de antigüedades rusas, entre ellas, uno de los famosos Huevos de Fabergé, "el Huevo de Anastasia". Sin embargo, antes del día de la exposición, la residencia de los Tsujido es asaltada por un comando de fuerzas especiales que busca hacerse con el huevo. Gracias al valor de Miyuri (en este capi gana muchos puntos de carisma, y la perdemos un poco el odio), y a la dependencia masoquista de Hana, Katja consigue derrotar a los asaltantes. Sin embargo, el huevo (que aún estaba encerrado en una cámara de seguridad esperando su traslado) ya ha caído en manos de alguien: Ootori y Lizzie, que lo emplearán como la llave necesaria para localizar el Theotokos de Sary Su.

En resumen, un tomo bastante entretenido dónde tenemos de todo: combates elementales bastante cundientes, cuerpos femeninos con los que regalarnos la vista, y un excelente y macabro sentido del humor gracias a la gothic loli de Katja (¡Azóteme a mí también, Katja-sama! xD).

Lo mejor: La portada (realmente bonita con Katja =3). Las páginas a color. Los comentarios del guionista. Los cuerpazos que se gastan Tomo y Miyuri. Teresa de chiquitina. El tronchante sadismo de Katja. Lo oscura que se pone la serie a veces, haciéndonos olvidar que va de un tío que chupa tetas para recargar las pilas (xD).

Lo peor: Lo ya mencionado en el tomo anterior (aunque la calidad del dibujo aquí se mantiene más constante).

Reseñas de tomos anteriores: #1